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Los Brioles. Foto: Magic Pop |
No vamos a engañarnos: las posibilidades de presenciar un
gran concierto de rock and roll, un domingo por la tarde de un mes de enero, en
estos tiempos que corren, con una sala abarrotada de público entregado, son más
bien remotas por no decir inexistentes.
A
no ser que hayas tenido la suerte de estar en el sitio adecuado, en el momento propicio y con la compañía idónea: un domingo 19
de enero de 2014 en el
Bluegrass Bar la Traviesa de Torredembarra, escuchando
a los
Brioles regalándote toda una lección magistral de actitud, agilidad
instrumental, grandes canciones propias, versiones memorables y hasta cuatro
bises si no es que contamos mal.
Anclado en la primera fila del concierto de la Traviesa, uno oye y ve
cómo son en el escenario dos auténticos genios del rock and roll: los hermanos
Nunes, Jorge a la guitarra y voz principal más Daniel al contrabajo y voces; acompañados
para la ocasión por su nuevo baterista, Pep de Sabadell, “un hombre elegante”,
que con su semi batería mostró el entusiasmo y la constancia necesaria para
estar a la altura de estos dos grandes músicos.
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Los Brioles. Foto: Magic Pop |
El concierto fue un repaso a algunos de sus mejores temas. Canciones
cantadas en español como “Pegado a ti”, o “Los hombres muertos no hacen ruido
al caminar”, y otras en inglés como el
“Down,down,down”, tema estrella de su más reciente disco. El poder de
convicción en ambos idiomas es francamente enorme. Por lo que se refiere a las
versiones, nos ofrecieron unas cuantas, todas ellas impregnadas de su excelente
talante instrumental y sobre todo, bajo ese manto compacto que define su estilo
original. Mediante esos parámetros propios no solo mantienen toda la energía y la
pasión de los originales, sino que consiguen dotarles de una vitalidad reforzada.
Nos referimos a temas míticos como “It’s Only Make Believe” de Conway Twitty;
el “Should i Stay or Should i Go” de los Clash;
el “Goo Goo muck” de Ronnie Cook y los Gaylads; o el “California Sun “
de Henry Glover y Morris Levy.
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Los Brioles. Foto: Marilen Jett |
Tanto Jorge como Daniel son dos auténticos genios que, con
los años, más de treinta sobre los escenarios,
han sabido rentabilizar su virtuosismo
con el objetivo cumplido de procurarse un sonido propio, con raíces en
los cincuenta y con actitud punk. Tras verles cantar y tocar sobre un
escenario, es fácil reconocer muchos de los esquemas, guiños y recursos de
otras bandas de rockabilly y psychobilly posteriores, y no solo a nivel
estatal. Daniel saca un rendimiento brutal a su depurada técnica del slap con
una ejecución impresionante. Sigue tirándose por el suelo, se sienta sobre el
instrumento, y toca con tal fuerza que hasta saca las cuerdas del puente. Por su parte, Jorge a la guitarra es pura magia. De su guitarra Grescht surgieron
unos riffs espectaculares, interpretados con una agilidad pasmosa, entre subidas y bajadas por el mástil
probando casi todas las posibilidades de formación de acordes, incluidos solos de
fantasía presentes tanto en los temas
cantados como en los instrumentales. Por
su parte, el nuevo baterista, pese a ser su segundo bolo con la banda, no paró
de bailar y estuvo a la altura. Demostró una gran predisposición a formar parte
de una maquinaria perfectamente engrasada que funciona a la perfección sin
fisuras, pase lo que pase. Para muestra y a modo de anécdota podemos mencionar que hubo un tema en
el que el baterista se paró un breve instante para pillar el rimo preciso. En
su descargo hay que mencionar que los temas casi se encadenaban uno con otro, sin
apenas descanso. Pues bien, los hermanos Brioles siguieron tocando con una
compenetración fantástica mientras que el baterista se adaptaba. Jorge comentó
en broma por el micro: “Se creía éste que nos íbamos a parar… “. Pues no, el
baterista fue el que se amoldó al ritmo, eso si, perfectamente.
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Los Brioles. Foto: Magic Pop |
En definitiva, si estuviste en tan magistral concierto seguro
que coincidirás con nosotros que fue una ocasión especial y casi única. A
nuestro modo de ver, uno de los mejores directos que hemos presenciado últimamente
y eso que, como ya hemos remarcado al principio, tuvo lugar un domingo por la
tarde; aunque, todo sea dicho, este emblemático
local de Torredembarra nos ha acostumbrado ya a un habitual programa dominical
sin desperdicio alguno.
Los Brioles triunfaron en la Traviesa como si fueran
un grupo que se encontrase en su mejor momento mediático. Pese a los
comentarios del paso del tiempo, de ese “down,down,down” que, según ellos,
resume su carrera, así como de los años que acumulan estos veteranos músicos, el
público bailó y disfrutó de todas y cada una de sus canciones repletas de esas virtudes
que identifican a estos grandes músicos.
El tremendo espectáculo que nos
ofrecieron fue el resultado, a partes iguales, de esa indiscutible veteranía pero
también de esa actitud comunicativa de rock and roll que mantiene su y nuestra juventud
intacta. Unas características esenciales para poder afirmar con rotundidad de que
los Brioles son unos auténticos maestros dispuestos a seguir aprendiendo para
compartir con nosotros momentos memorables ya sea en disco como en directo.
Más de treinta años de rock and roll
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Los Brioles. Foto: Magic Pop |
La historia musical de los hermanos Jorge y Daniel Nunes,
hijos del conocido director de cine José María Nunes (n. 1930 – d. 2010)
empieza con grupos de rock and roll de
primeros de los ochenta en los que se mezclaba el rockabilly de los cincuenta
con el punk de finales de los setenta.
Bandas como ¿No hueles a Perro? , formada en 1981, en la que tocaban
temas propios y versiones de los Ramones o de Eddie Cochran. A mediados e la década forman parte de los
Boppins y con su batería, Javier "Bugs", más el cantante Trashmike, crean
los Brioles en 1986. Tras diversas circunstancias de encaje, Jorge Nunes se encarga
finalmente de cantar, Daniel al contrabajo y Bugs la batería. Con esa formación
dan su primer concierto el 8 de agosto de 1987. Fue el primero de sus
bateristas que han ido cambiando con el tiempo pasando otros percusionistas
como Jordi, Salvador "Joker",
Blas Picón y hasta hace poco Pedro A. Ortega.
Su discografía está compuesta por “Brioles” (Macaco Records Lp
1991), “Enmedio de la Jungla”(
Macaco Records Ep 1993), “Train of Fools” (Burningcrew.
Cd 1998), “Rocket Men” ( Revel Yell Music 10″ 2000), “Jungle Jamboree” ( Revel
Yell Music recopilatorio Cd 2006), “Love, Rhythm and Hate” ( El Toro Records Cd
y 10″ 2009) y “Down, Down, Down” (El Toro
Records Ep y Cd 2012). También han incluido varios de sus temas en una
decena de recopilatorios o compartiendo disco con Cohetes, Moonshines y
Broncats para Don Gato Records de Asturias. En 2014, el Toro Records edita un picture disc con el título de “Hit The Floor with…”
(+ info), y Carajillo records saca en Ep de vinilo una maqueta que vio la luz en 1988 en formato K7 con cinco temas: "Los dos", "Un monstruo entre nosotros" en su cara A; más "El cerdo humano", "Cien kilos" y "Esta noche" en su cara B. La grabaron Jorge a la voz y guitarras; Daniel al contrabajo y Jordi Clemente a la percusión.
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Los Brioles. Foto: Magic Pop |
Entre sus proyectos paralelos cabe destacar
The Rockin´Roosters banda de rockabilly creada en 1992 con Blas Picón al que
siguieron los Bop Pills con Mario Cobo; los Roosters de rock and roll clásico más
R&B y blues con una cantante llamada Paz que se convertiría en Ella; o los
Swindlers; más los Thunderbird Head y los Hog Valley Tompers con Spike Neil de los
Frenzy, Inspector Tuppence, y Hellmaniacs. Picón dejó la banda en 2007 para
formar con Mario Cobo los Nu Niles recientemente separados. Por otra parte, cabe mencionar que Daniel forma parte de Matt and The Peabody Ducks, un trio creado con músicos de The Quasars y Legacaster Hillbilly Trio.
Entre sus mejores
temas, están “Pegado a Ti”, “Los Hombres Muertos no Hacen Ruido al Caminar”, “Cuando
el Gato no Está Los Ratones Bailan”, “Down Down Down”, “Show Me”, “Rocket Men”, o
“I’m Gonna Ride”, o esa grandiosa versión del "It’s only make believe" de
Conway Twitty.