jueves, 29 de noviembre de 2012

Muere Ian Campbell, músico de folk

El 24 de noviembre de 2012 moría a los 79 años, a consecuencia del cáncer que padecía, el músico Ian Campbell, quien creó  la conocida formación Ian Campbell Folk Group esencial para entender el movimiento  folk británico de los sesenta. También es padre de Alistair Ian Campbell (Birmingham, 15 de febrero de 1959), músico británico conocido por ser líder de los UB40.  

El grupo se creó en 1956 en Birmingham con el nombre de Clarion Skiffle Group. Dos años después cambiaron al nombre por el que se les conoce y desde entonces han sido uno de los grupos más respetados e influyentes de la escena folk inglesa e internacional. Su primer disco de 1962, un Ep llamado “Ceilidh At The Crown”, fue la primera grabación de folk en vivo editada en vinilo.

En 1963, firmaron con Transatlantic Records y sacaron su primer álbum de estudio. Fueron muy populares en la televisión británica y actuaron en numerosos festivales hasta su disolución a finales de los setenta. La banda empezó formada y en actuivo hasta 1978 por Ian Campbell, guitarra, voz; Lorna Campbell, voz; Dave Phillips, guitarra hasta 1963; Gordon McCulloch, banjo hasta 1959, substituido por John Dunkerley  al banjo, guitarra, más acordeón hasta 1976 y que murió en 1977. Otros de los músicos que pasaron por sus filas fueron Dave Swarbrick al fiddle, Brian Clark a la guitarra, Mansell Davies al bajo; George Watts a la flauta; Dave Pegg al bajo; Andy Smith a la mandolina y  banjo, y Mike Hadley al bajo.

Tras su primer Lp de estudio llamado “This Is the Ian Campbell Folk Group! “ (Transatlantic 1963 y reeditado en 1964 por Contour), sacaron también con Transatlantic en 1964  “Across the Hills”; en 1965 “Coaldust Ballads”, en 1966 “Contemporary Campbells”; en 1967  “New Impressions”; y en 1968 “The Circle Game”;  más en 1969 “Ian Campbell and the Ian Campbell Folk Group with Dave Swarbrick” con Music for Pleasure; en 1971 “The Sun Is Burning” con Argo; en 1972 “Something To Sing About” con Pye y en 1974, “Live” con Sonnet.

Aquí interpretan en 1964 el tema titulado "Marilyn Monroe" que en España versionaron Nuestro Pequeño Mundo en los setenta.



 

miércoles, 28 de noviembre de 2012

“Give a tree your name” de los Feedbacks, entre los mejores trabajos de powerpop de todos los tiempos

Dicen que el powerpop, como estilo, lo inventó Pete Townshend quien fue el primero en utilizar esta categoría léxica para definir la música de los Who. La banda británica no fue la única en su época, en acelerar la melodía del pop con la fiereza rítmica del rock and roll. Como tampoco parece fácil hablar de powerpop sin tener en cuenta a grupos de los setenta como los Big Star, Raspberries, Badfinger, Rubinoos, entre otros posteriores como los Plimsouls o Records, por citar unos cuantos. Sea cual sea su origen, en este país hablar de powerpop implica necesariamente referirse a discográficas resistentes como Rock Indiana y grupos como The Feedbacks. Juntos editaron el año 2011 uno de los mejores discos del estilo, no solo a nivel estatal sino también internacional, que vale la pena recordar por mucho tiempo y con todo lujo de detalles aunque hayan pasado unos cuantos meses de su salida al mercado discográfico. 

The Feedbacks se crean en Turón, Mieres (Asturias) en noviembre de 1994 con Adolfo García, (cantante, guitarra y compositor), su hermano Carlos, (bajo y voz), más dos amigos, Javi Cimadevilla, (guitarra), y Diego Fresno (batería) que sería substituido a partir de 2004 por Pablo González “Pibli” (Doctor Explosion). Sus primeros temas son ya una extraordinaria mezcla de punk y power pop. Pronto empiezan a destacar por la composición de canciones propias. Tres de sus primeras canciones las graban en los estudios Odds de Paco Loco y se convierten en su primer EP, titulado "The Chords Are The Same".  A principios de 1996 se publica su segundo single "Summer again" con un número del fanzine Rock Indiana. Fue entonces cuando se pone en contacto con ellos el sello alemán  "Screaming Apple" e incluso hablan de sacar todo un Lp pero ya lo tenían comprometido con No Tomorrow. Al final se editaría un nuevo 7" de cuatro temas propios llamado "Pop Invaders".  A finales de 1996 saldría un split single con The Cheeks, en el se incluye un tema llamado "She goes down" y una versión de un raro tema de los Hollies, "Can´t get nowhere with you". El 7" se llama "A fix of fun". Ese año 1996 también graban su  LP de debut “Ready, Steady, Bang” que edita No Tomorrow.


En 1999 sale su segundo álbum con Rock Indiana, “Speedway”. Su tercer trabajo se titula “Nothing a little pop won’t cure” (2002) y el cuarto “My own revolution” también editado por Rock Indiana en 2005. Al año siguiente sacan “Sunday morning record” y en 2011 este “Give a tree your name”, una vez más con la discográfica Rock Indiana.  

Este último álbum, el sexto de la carrera de los Feedbacks, se grabó en los estudios de Paco Loco en El Puerto de Santa Maria (Cádiz) en septiembre de 2010, quien se encargó también de la producción. Fue masterizado por Fausto Martín. Todos los temas son originales de Adolfo García, excepto la canción "The One for Him" cuya música es de Carlos García y la letra de Angel Kaplan, "Not Your Kind" y "How Long" son de Pablo González; "Run with you" de Iván Díaz y "Glitter Girls" tiene música de Adolfo García y letra de Sara Álvarez. José Francisco Sánchez es el responsable del artwork, diseño y fotos con una maravilla de portada donde se entremezclan motivos silvestres con otros de urbanos con un gran dominio de la luz y el colorido.   

El disco está grabado por Adolfo García, voz principal, guitarras y piano; Javier Cimadevilla, guitarras; Carlos García, bajo; Pablo González, baterista más vocalista en "Not your kind" y "How Long", y guitarras. Canta también Ivan Díaz de Bubblegum en "Run with you"; y Paco Loco se encarga de poner detalles con pedal steel guitar, slide guitar, acústicas, lap steel, banjo, piano, Hammond B-3, Fender Rhodes y órgano Vox continental.

El primer tema que nos ofrecen, “Lost the Words” empieza con acoples y ese ritmo que va creciendo para dar entrada a los arpegios de piano que anteceden a la excelente voz principal rodeada de algunos acordes con fuzz que endurecen el concepto melódico. Le sigue “The One for Him”  canción de amor y espera para ser correspondido. Un tema jovial,  divertido, que discurre con ritmos ligeros y una melodía enternecedora. Buen solo de guitarra que se distingue entre toques de powerpop americanos con recuerdos a las grandes bandas de los Ángeles. . 
 
“The Canyon” es el título de la siguiente canción que destaca por su guitarra acústica, con posterior entrada de eléctrica y consistente ritmo. Un tema para explicarnos como “hicimos la ruta que habíamos planeado, preguntándose cuándo se pierde la pasión”. “Always waiting” nos recuerda a los detalles de un Elvis Costello cercano a los planteamientos americanos, con ritmo trepidante, coros sensuales, arreglos preciosistas, y esos peculiares riff de guitarra sencillos pero tremendamente efectivos. En este tema  dicen encontrarse, “a la espera de encontrar la suerte”, “siempre esperando, no me quiero quedar en casa, pero estoy muy cansado mientras la gente viene y va…”.   
 
“Name of the Game”, cierra la cara A del disco con un delicioso medio tiempo juguetón, propio del mejor pop psicodélico. Avanza a pasos cortos de piano mientras se incorporan órgano, pizzicatos, detalles curiosos que acompañan a una voz con ese aire desenfadado de "toytown pop".  A destacar ese final apoteósico con ramalazos americanos para dejar en solitario a una batería que ocupa los últimos compases con brillante desparpajo rítmico… “Soy como un niño pequeño que va a ninguna parte, sino que se convertirá en un viejo aburrido…No puedo creer que mi fiesta de cumpleaños acabó…”


La Cara B se abre con la genial  “Not Your Kind”. Me permito el lujo de considerarla, sin titubeos que valgan, una de las diez mejores canciones de todos los tiempos. Se trata de un  “temazo” espectacular por el que ya valdría la pena haber comprado este disco. Tras tropecientas escuchas, sigue poniéndome los pelos de punta. Grandiosos arreglos de guitarras y ritmo, voz impecable, melodía encantadora, fiereza rítmica, entusiasmo powerpop… Una canción impresionante ante la que me faltan adjetivos para explicar todos los sentimientos que me inspira.     

Le sigue “Won´t Let Me Go”, con sus guitarras new wave que van creciendo en intensidad a la búsqueda de un cénit que va más allá de un simple estribillo. Un tema con excelentes recursos de guitarra en el que nos cuentan que “Uno quiere siempre más tiempo para llevar a cabo sus pensamientos”, “volver a empezar y romper las reglas”.  “Run With you” destaca por un poderoso Hammond, con emocionante melodía, muy americano, en la que explican que “solo quiere abrazar la amada y correr con ella sin esa sensación de estar perdiendo el tiempo”. “Call her summer”, siguiente corte, es un dulce tema de pop, una canción con toques de surf para “montar juntos esa ola, sin que le rompa el corazón…”. Con “How long”, introducen uitarras y planteamientos muy potentes con los que casi se acercan al sonido de bandas como los Pixies y la última canción, “Glittter girls” contiene unos toques Glam, que la convierten en una de los momentos musicales más divertidos del disco, y en la que nos hablan de esos bailes de graduación, de una niñez que se acaba, para empezar a disfrutar del momento presente escuchando buen rock and roll.
 
Si tuviéramos que definirlo con una sola frase, quizá podríamos resumir que el powerpop es la máxima expresión de la melodía con la contundencia rítmica precisa. The Feedbacks nos demuestran especialmente con este álbum que no solo dominan a la perfección sus esenciales características sino que encima son capaces de crear su propio espacio compositivo en el que brillan temas inolvidables que deberían pasar a los anales de la historia de la música. “Give a tree your name” es un disco de canciones redondas, emocionantes, tremendas, que no tienen nada que envidiar a los grandes maestros de los setenta ni ochenta hasta llegar a la actualidad. Con sus fascinantes guitarras, esa extraordinaria voz principal, y con ese potente acompañamiento rítmico, consiguen dar vida a temas que perdurarán para siempre en el imaginario colectivo de los seguidores incondicionales de ese pop siempre poderoso que nos apasiona. 

Nota: Puedes escuchar los temas de este disco “Give a tree your name” en la web de Rock Indiana o en el bandcamp del grupo.

Fallece el músico de R&B y blues, Mickey Baker

McHouston “Mickey” Baker nació el 15 de octubre de 1925, en Louisville, Kentucky, y falleció el 27 de noviembre de 2012 en Toulouse (Francia). Fue un gran cantante y guitarrista que formó parte del dúo Mickey & Sylvia con Sylvia Vanderpool, que después se convirtió en Sylvia Robinson, nacida el 6 de marzo de 1936 en Nueva York y fallecida el 29 de septiembre de 2011, en Secaucus, Nueva Jersey.

También destacó como intérprete de blues, productor y colaboró con otros grandes artistas como The Drifters, Ray Charles, Ivory Joe Hunter, Ronnie Bird, Chantal Goya, Big Joe Turner, Billy Bridge, Francoise Hardy, Sylvie Vartan, Colette Magny, Louis Jordan, Ruth Brown o Coleman Hawkins.

Mickey pasó parte de su infancia en un orfanato de donde se escapaba con frecuencia. Se instaló en Nueva York donde trabajó de friegaplatos hasta que decidió dedicarse al billar. Escogió aprender a tocar la trompeta pero en la casa de empeños por el dinero que tenía, 14 dólares, tan solo podía conseguir una guitarra. Empezó tocando jazz por numerosos lugares de los Estados Unidos pero como no le daba para comer, un día estuvo escuchando a un guitarrista de blues y se decidió por pobrar. Con el blues sí que empezó a ganar algún que otro dólar que al final le permitió volver a Nueva York donde poco a poco consiguió hacerse con un nombre en el mundo de la música.   

Mickey & Sylvia
Mickey era el profesor de Sylvia y se inspiraron en el dúo formado por Les Paul & Mary Ford para crear el suyo. Tuvieron un gran éxito en 1956 con el tema “Love is Strange” que se convirtió en disco de oro tras vender más de un millón de copias. La pareja artística compró su propio club nocturno y crearon su propio sello discográfico y aunque dejaron de actuar juntos en 1956, continuaron grabando hasta 1965, consiguiendo un par más de éxitos.  

Después, Mickey se trasladó a Francia donde empezó una fructífera carrera como músico de sesión. Sylvia tuvo un éxito en 1973  con el tema “Pillow Talk” y ayudó en la formación del sello Sugar Hill. 

En solitario, Mickey “Guitar” Basker grabó varios discos como “Wildest Guitar” (1959), “But Wild” (1963), “Mississippi Delta Dues” (1973), “Take A Look Inside” (1973), o “The Legendary Mickey Baker” (1992). También destacan sus colaboraciones de blues con el pianista Memphis Slim (1915-1988) en discos como “Bluesingly Yours” (Polydor 1967).  


Primer video, interpretando su tema Steam Roller editado por King y recopilado recientemente por Vampisoul en el volumen 2 de la serie R&B Hipshakers.

 

Segundo video, con el tema "Love Is Strange" con el que triunfó el dúo Mickey & Sylvia en 1956.


Tercer video, interpretando blues acompañado de Memphis Slim en 1968.



 

martes, 27 de noviembre de 2012

Muere Michael Dunford de los Nashville Teens, los Plebs y los Renaissance

Michael recientemente
Michael Dunford  murió el 20 de noviembre de 2012 en Surrey, Inglaterra, su ciudad natal. Fue guitarrista y cantante de los grupos The Nashville Teens que se hicieron muy famosos en los sesenta sobre todo por el tema "Tobacco Road". También tocó con The Pentad y  The Plebs así como con el grupo de rock progresivo y folk Renaissance.

The Nashville Teens fue una banda de pop formada en Weybridge , Surrey , en el verano de 1962. Empezaron Ray Phillips, cantante solista y bajo (1962–73); Arthur Sharp  (guitarra, cantante solista (1962–72); Mick Dunford, guitarra solista (1962–63); John Hawken, teclista   (1962–68) y Dave Maine, baterista (1962) substituido por Roger Groome (1962–63; 1966–73); más el bajista Pete Shannon Harris (1962–66), reemplazado por  Neil Korner  (1966–69), y después  Roger Dean (1969–73). También tocó con ellos la batería Barry Jenkins (1963–66). En 1963 entró como cantante solista Terry Crowe. John Allen substituyó a Dunford y estuvo hasta 1969. Otros de los músicos que pasaron por la banda hasta los setenta fueron Trevor Williams y Len Tuckey. En los ochenta hubo una reunificación en la que solo estaba de los músicos originales Ray Phillips.


Los Nashville Teens respaldaron a grandes artistas como Jerry Lee Lewis,  Carl Perkins en su exitoso sencillo "Big Bad Blues" (mayo de 1964), y también tocaron con Chuck Berry cuando actuó por la Gran Bretaña. También acompañaron a Mickie Most , que posteriormente produjo en  junio de 1964 su single de debut , una interpretación del tema de John D. Loudermilk,  "Tobacco Road ", que alcanzó el número 6 en la lista de singles del Reino Unido y el número 14 en la de los Estados Unidos. Tocaron las guitarras en la grabación de estudio  Big Jim Sullivan y Jimmy Page.  También les produjeron Andrew Loog Oldham y Shel Talmy. 

Después sacaron otros singles  con temas como "Find My Way Back Home", "This Little Bird", o "The Hard Way" y en 1966 Jenkins les dejó para unirse a The Animals , y fue reemplazado por su predecesor Roger Groome.  Ray Phillips recibió una oferta para unirse a Cream en 1966 pero la rechazó.  Decca no les promocionó suficiente y tampoco supieron encontrar el gancho que les llevara al éxito. Volvieron a realizar versiones de Carl Perkins, Gene Vincent o Chuck Berry, y en 1971 sacaron un single para Parlophone con una canción de Roy Wood grabada por The Move, “Ella James”.   Se separaron en 1973 aunque volverían con diferente formación en los ochenta. The Nashville Teens aparecieron en tres películas en 1965 y editaron un par de álbumes:  uno  a mediados de los sesenta en los Estados Unidos y Canadá; y otro a principios de los setenta.


Michael Dunford en los setenta 

Cuando Mick Dunford les dejó en 1963 se incorporó a los Plebs con el cantante Terry Crowe y el bajista Danny McCullough que después estuvo en la banda de Eric Burdon. Sacaron un single con los temas  "Bad Blood"  y "Babe I'm Gonna Leave You" en 1964.

En 1970 se uniría al grupo de rock progresivo y folk Renaissance formado en 1969 con los miembros de los Yardbirds, Jim McCarty y Keith Relf, más Louis Cennamo, John Hawken, y Jane Relf.  Cuando entró Dunford a tocar la guitarra, Jane Relf y Terry Crowe se encargaban de las voces, John Hawken tocaba los teclados;  Neil Korner tocaba el bajo y Terry Slade, la batería. En 1971 se incorporó la cantante Annie Haslam que con Dunford liderarían la banda. Publicarían una docena de álbumes antes de separarse a mediados de los ochenta.  Entre sus trabajos más destacados se encuentran “Renaissance” (1969), “Illusion” (1971), Prologue (1972), Turn of the Cards (1974), y Scheherazade and Other Stories (1975), Novella (1977), entre otros. 


Renaissance a mediados de los setenta

En 2001 volvieron a reunirse para grabar material de estudio. Volvieron a actuar en directo y sacaron un álbum en vivo. Tras otro periodo de inactividad, la nueva formación se presentaba con el espectáculo “Turn of the Cards and Scheherazade and Other Stories Live 2011”. Ese mismo año volverían a sacar un nuevo álbum “Grandine il Vento”.  La noche que murió  Michael Dunford, regresaba a casa tras la primera parte de la gira del grupo por los Estados Unidos.  Sufrió una hemorragia en su casa de Surrey, fue ingresado en el hospital y murió.

Primer video: los Nashville Teen interpretando, entre gritos de las fans, su versión del "Tobacco Road" de 1964.

 
 
Segundo video, los Plebs y su "Bad Blood" de 1964.

 

 
Tercer video, los Renaissance y su "Can you Understand" de 1973.
 

lunes, 26 de noviembre de 2012

Muere Earl “Speedo” Carroll de los Cadillacs y Coasters

Earl Carroll nasció el 2 de noviembre de 1937 y murió en Nueva York el 25 de noviembre de 2012. Formó parte del grupo de doo-wop The Cadillacs, cuyo mayor éxito fue el tema lanzado en 1955 que se convertiría en su apodo “Speedo”.  Después se uniría a los Coasters y en los noventa volvería a cantar con los Cadillacs.

Los Cadilacs empezaron con el nombre de The Carnations en 1953 con Earl Carroll, como primera voz, acompañado por Bobby Phillips, Lavern Drake, y Gus Willingham. Después se unió a ellos   James "Poppa" Clark.  Con Josie Records sacaron sus primeros temas en 1954 con los títulos de “Gloria” y “Wonder Why”. Al año siguiente Willingham y Clark son substituidos por  Earl Brooks y Charles Wade. 

The Cadillacs, "Speedo" segundo por la derecha
Tras “Speedo” (1955), Lavern Drake dejaría el grupo en 1956 y le substituiría JR Bailey. En 1957 se partió el grupo en dos: los The Four Cadillacs, con JR Bailey, Lavern Drake y dos nuevos cantantes, Roland Martínez y Bobby Spencer (Después se les uniría el saxofonista Jesse "Tex" Powell, y grabaron en 1958 también con el nombre de Jesse Powell and the Caddys). Los otros cuatro: Carroll, Wade, Brooks, y Phillips, quien murió en 2011, se unieron poco más tarde como Earl Carroll y los Cadillacs. En el año 1958 vuelven a formar un solo grupo con algunos de sus miembros hasta 1962 que deciden separarse definitivamente hasta 1970. 


The Coasters, "Speedo" segundo por la derecha 
Earl Carroll substituyó en 1961, en los Coasters, a Cornel Gunter que a su vez había entrado en lugar de Leon Hughes.  Los Coasters se formaron en 1955 con Carl Gardner, fallecido en 2011,   y Bobby Nunn (ambos de The Robins), más Leon Hughes y Adolph Jacobs.  Fueron uno de los primeros grupos de rock and roll formados por muchachos negros que consiguieron triunfar hasta entre la audiencia de blancos.  Asociados con la pareja Leiber & Stoller protagonizaron una de las mejores épocas musicales en los Estados Unidos con temas como “Down in Mexico”, “Charlie Brown”, “Young blood”, “Yakety Yak” o “Poison ivy”. Cuando Earl entró en los Coasters, estaban también Carl Gardner, Billy Guy, Will "Dub" Jones, y Thomas "Curley" Palmer, guitarra.  The Coasters firmaron con Columbia Records en 1966, pero nunca fueron capaces de recuperar su fama anterior. Estuvo con los Coasters hasta 1970.

En la década de los noventa, un periódico dio a conocer como Carroll se había hecho muy popular trabajando como conserje en una escuela primaria de  Nueva York donde era muy querido por los niños. Incluso fue el personaje principal de un libro de Ann  Morris titulado That's Our Custodian (2003).

Carroll murió en un asilo de ancianos en Nueva York después de un derrame cerebral y tras una batalla contra la diabetes.




Fallece Chris Stamp, mánager de los Who

Christopher Thomas Stamp nació el 7 de julio de 1942 en Londres y murió el 24 de noviembre de 2012 en Nueva York. Hermano del actor británico Terence Stamp, fue un conocido productor y mánager, asociado con  Kit Lambert, de grupos como los Who y Jimi Hendrix en la década de los sesenta y setenta. Con Lambert fundó también la discográfica Track Records. Tras el negocio musical y un periodo de adicción a las drogas, se dedicó a las terapias alternativas como el psicodrama para programas de desintoxicación.   

Stamp empezó colaborando en el mundo del cine con Kit Lambert en los Shepperton Film Studios cuando se interesaron en 1963 por la emergente escena musical británica.  “El propósito era encontrar un grupo que representara de alguna manera las ideas emergentes de nuestro tiempo. Un grupo rebelde y diferente de la escena pop” dijo en una ocasión Stamp. Oyeron a los Who, entonces llamados The High Numbers, y decidieron que ese era su grupo. Luego se enteraron de que su representante Peter Meaden no tenía ningún documento de derecho legal sobre la banda y en 1964 aceptó que Lambert y Stamp se encargaran de ser sus managers.  Los Who recuperaron ese nombre y se centraron en potenciar su imagen mod y maás tarde en la siofistacación de sus composiciones conceptuales.

En 1966, Stamp y Lambert  crearon su propio sello Track Records y ficharon a Jimi Hendrix con el que sacaron su “Are You Experienced”. También sacaron trabajos discográficos de Arthur Brown con su banda Crazy World y de los Golden Earrings. Chris Stamp negoció un contrato con Essex Music según el cual si los cuatro Who escribían algún tema por separado cada uno se embolsaría 500 libras. Por eso el segundo Lp, “A Quick One” los cuatro participan como compositores aunque en realidad prevalece la guitarra de Pete Townshend. Stamp se encargó de la producción de los álbumes “Magic Bus” en 1968, “Tommy” en 1969, “Who’s Next” en 1971, “Quadrophenia” en 1973 y la banda Sonora de “Tommy” en 1975.

Stamp y Lambert con Pete Townshend, de cara
Por problemas con las drogas, en 1975 los Who se deshicieron de Stamp y Lambert en  favor de Bill Curbishley. Ellos dos se trasladaron a Nueva York para producir al grupo de soul, Labelle. Track Records desaparecía en 1976. Kit Lambert se trasladó a Italia donde murió en 1981 de una hemorragia cerebral tras una caída. Stamp entró en 1987 en un programa de rehabilitación contra el exceso de drogas y eso le inspiró para dedicarse a la lucha contra las adicciones con métodos alternativos como el psicodrama. Volvería a estar en contacto con los Who por ejemplo en el reedición en los noventa del álbum “A Quick One” de 1966, y fue asesor de la Fundación John Entwistle, de educación musical para niños de bajos recursos.   
Stamp se dedicó a las terapias alternativas para luchar contra las adicciones en el Hudson Valley Psychodrama Institute, o en el Freedom Institute de Nueva York. Murió víctima del cáncer en el Mount Sinai Hospital de Nueva York.

En este video podemos ver a los Who interpretando "A Quick One While He's Away" en el festival de Monterey el 18 de junio de 1967.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Albert Gil guanya ofici amb el Cas del Serrell, un excel·lent llibre d’intriga i referències musicals

"El Cas del Serrell" és el títol del segon llibre del músic i escriptor barceloní Albert Gil, i aquest fet numèric pressuposa ja uns aspectes essencials a tenir en compte en qualsevol trajectòria literària. Partim del principi que un escriptor hauria d’enfocar, per norma, el segon treball, i els següents, com un veritable repte tan personal com professional amb l’objectiu de cercar una millora substancial respecte a l’anterior obra. Encara que sembli un procés creatiu evident i fàcil, no ho és. El propòsit d’escriure millor sempre és possible i necessari però, en alguns casos, xoca amb les hipnòtiques rendes d’una eufòria existencial que ens manté en un núvol arran d’haver aconseguit publicar, per fi!, una primera obra.

Si es dóna el cas que, amb el  primer llibre, l’autor novell deixa bocabadats a amics, amants, coneguts, familiars, únicament per empatia o simpatia, es pot crear un precedent perillós que a la segona obra passa inevitablement factura. Podríem afegir també que si l’autor ha obtingut alguna que altra bona crítica per ser qui és i no pel que ha escrit, cap la possibilitat que amb el segon llibre caiguin, pel seu propi pes, algunes mancances importants que a la primera es van passar per alt però que ara clamen sorprenentment al cel dels bons escriptors. Es com si algú, des del regnat incorruptible de la literatura d’elit, hagués decidit fer els ulls grossos al primer i mirar-se’l amb lupa el segon.

Ara bé, també sol passar que si aquest autor novell decideix fer el segon llibre amb preses i obcecat per l’eufòria, acabarà probablement per topar amb crítics, alguns d’ells  molt envejosos, que es carregaran sense contemplacions la seva voluntariosa tasca de ser coronat, el més aviat possible, com a escriptor de prestigi.

Foto Silvia Beltran
Amb aquestes premisses, resulta evident que, sense un període de reflexió i treball acurat, és més que probable que les editorials ens ofereixi al mateix autor explicant-nos les mateixes coses amb el mateix estil que el seu anterior llibre. I això no és bo o, si més no, sincerament em sembla avorrit. Si es tracta d’un autor dels anomenats mediàtics, el llegirem o no, gairebé per rutina mitòmana, però si no és el cas, el desarem al calaix per llegir-lo a l’estiu que es quan sempre diem que tenim més temps per fer el ganso i, per tant, per llegir qualsevol cosa que ens faciliti la migdiada.

Suposo que si he tingut l’amabilitat de començar a llegir aquesta crítica, potser us interessi ara conèixer la meva opinió, sense més preàmbuls, sobre aquest segon llibre de l’Albert Gil titulat "El Cas del Serrell" publicat aquest 2012 per l’Editorial Base. Vagi per davant que estigueu o no d’acord amb el meu humil veredicte, vull que quedi clar que em pronuncio des de la meva visió personal, subjectiva com perfectament prescindible. Al cap i a la fi, la meva opinió us resultarà menys profitosa que el vostre propi parer després d’una necessària i molt recomanada lectura.

Albert als 80. Brighton 64
Però abans d’analitzar aquest llibre, em permetreu que destaqui l'enigmàtica coberta a càrrec de Marc Herrando i us parli una mica de l’autor. Crec que és fa necessari un resumen biogràfic per entendre com van a parar a la seva obra tots els referents musicals que domina amb coneixement de causa. Albert Gil Giner neix a Barcelona l’any 1963. És llicenciat en Belles Arts i exerceix de professor d’animació tradicional i programes informàtics aplicats al disseny a l’Escola d’Art de Sant Cugat del Vallès (Barcelona). Ha estat o continua sent músic, productor, lletrista i compositor a bandes com Brighton 64, Matamala, Chest i Top Models des dels anys vuitanta fins l’actualitat. Activista mod des dels disset anys, va dirigir al llarg d’onze el segell independent Bip Bip Records. Segons consta a les notes biogràfiques, ara fa sis anys que va començar a escriure. Fins el moment ha publicat la novel·la “Pista lliure” l’any 2010 amb Pagès Editors i el conte «El Partit» al recull Íncipit 2010, editat per l’Escola d’Escriptura (Ateneu Barcelonès).

Ara sí, crec que ja puc parlar-vos, sense més antecedents, de les sensacions i reflexions  que m’ha procurat aquest llibre sobre l’enigmàtic “Cas del Serrell”. La primera impressió que el lector es podrà emportar ben aviat, després de llegir unes poques pàgines inicials, és que el seu autor ha guanyat ofici de narrador respecte al seu primer llibre titulat “Pista Lliure”. Si bé al seu debut literari se’ns oferia com a testimoni d’excepció per explicar-nos unes vivències, més o menys personals, i una opinió ben ferma i decidida al voltant d’un festival musical d’arrels sixties mod, ara l’Albert se’ns presenta com un escriptor que aporta a la literatura catalana un estil literari propi ben treballat, amb un llenguatge narratiu àgil i ric, on els fets i els personatges es delimiten amb molta cura i professionalitat.

“El Cas del Serrell” té un argument propi de novel·la policíaca però tractat amb matisos que l’allunyen dels tòpics. La història es desenvolupa arran del robatori, per part d’un cantant de rock and roll anomenat Flequillo, d’un repertori de cançons que li permeten recuperar l’èxit del passat. Un altre dels protagonistes principals és l’inspector Sacalm del Mossos d’Esquadra al qui encomanen el cas. Aquesta investigació el porta a conèixer un estil de fer les coses on tenen importància els drets intel·lectuals i també els somnis d’un grup de música. En aquesta trama, apareixen nombrosos personatges, en principi secundaris, com la Ginebra que denuncia els fets i origina l’actuació policial, així com periodistes, músics, representants, executius de discogràfiques, advocats de l’SGAE, o traficants de drogues. Alguns d’aquests personatges son ben reals, tot i que amb noms canviats, i sorgeixen de l’experiència tan personal com professional de l’autor. L’Albert els afegeix al seu relat de forma magistral, però com diu a la nota inicial del llibre: “Qui s’hi reconegui, felicitats. I que no s’ofengui, perquè aquesta és una obra de ficció, i hom no es mescla cada dia amb el món imaginari de ningú, a no ser que sigui per una bona causa”.

El llibre ja destaca, d’entrada, per la divisió dels capítols que inviten al lector a seguir la trama de forma ben original amb salts en el temps, cap endavant i cap enrere. Els personatges són ben creïbles, fins i tot ho serien sense el seu corresponent doble en el món real. Estan molt ben perfilats i xoquen amb la visió preestablerta que podríem  tenir d’alguns estereotips propis de la novel·la negra. No manca tampoc certa reflexió social al voltant del món polític així com pel que fa a altres aspectes d’actualitat com el criticat ús de la força per part dels Mossos d’Esquadra, però també sobre el consum desaforat de drogues, entre altres quotidianitats del món discogràfic i creatiu. L’autor no desaprofita l’ocasió per posar en boca del seus personatges, algunes reflexions politiques i socials sense cap mena de desperdici, sobre qüestions com per exemple la Barcelona real que s’estima en contraposició a la que li toca viure deformada per aquells que s’aprofiten del consum turístic indiscriminat.

El llibre es ple de petits relats complementaris que s’inclouen en la trama genèrica de forma encomiable. Per anomenar-ne un d’ells, us citaré l’anàlisi forense que els experts fan de les cançons, per encàrrec de la investigació, per dictaminar si estem o no davant d’un cas possible plagi. En aquest sentit, cal destacar que si bé és força improbable que una investigació per vulneració dels drets d’autor  comportés la intervenció tan entusiasta del nostre cos policial, aquesta circumstància temàtica no deixa de ser una excusa de luxe per analitzar els valors creatius de la nostra societat i en especial, el paper de la música dintre de la cultura de masses.

Tampoc falten moments hilarants tractats amb un estil sarcàstic, com el d’un Mosso enxampat robant Cd’s al Corte Inglés, o el d’un inspector de policia heterosexual amb una sobtada erecció al veure per accident una pel·lícula de porno gay.  Cal tenir també en compte que “El Cas del Serrell” no és una obra d’herois. Serà difícil que aquell que es cregui molt íntegre es pugui sentir identificat amb algun dels personatges principals. Fins i tot aquells que podríem anomenar com a “bons” tenen alguna cosa que els martiritza la consciència. En qualsevol moment podrien saltar a l'altra banda considerada "dolenta" per la moralitat establerta de la  societat de prejudicis que ens ha tocat viure. Ni tant sols el final és podria catalogar d’habitual. L’autor decideix deixar algunes portes obertes. Un recurs que pot resultar desesperant per aquells que creuen que la literatura, com la vida, ha de cercar un final clar que et permeti tancar el llibre o l’existència per sempre. “El Cas del Serrell” podria tenir fins i tot una continuació per tal d’esclarir alguns aspectes que queden en l’aire alhora que permet que el lector tregui les seves pròpies deduccions.    

Brighton 64, 2012. Foto Mireia Eire
En definitiva, la segona obra de l’Albert Gil em sembla un llibre extraordinari, ben estructurat, divertit, amb una trama ben construïda on destaquen uns personatges tan creïbles com fascinants. L’autor també ens ofereix un seguit de reflexions força crítiques amb l’actualitat quotidiana del món de la cultura y la realitat social. També em permeto el luxe d’afirmar que, amb aquesta segona obra, l’Albert ens aporta un estil propi possible després d’un exercici de reflexió disposat a afrontar la seva trajectòria literària amb una veu força original.

Reprenent les meves consideracions del principi, estic convençut que l’autor no ha tingut cap mena d’intenció de demostrar res a ningú, ni tampoc ha afrontat la seva creació com una segona oportunitat per confirmar la seva vàlua com a escriptor. Crec sincerament que ha fet molt bé en treballar la seva creació amb serenitat, al marge del que han dit i del que diran, sobre aquest llibre i també de l’anterior, ja siguin amics com potencials enemics, perquè és així i no d’altra manera com es fa ofici i “hom es mescla cada dia amb el món imaginari per una bona causa” sense entretenir-se massa amb els elogis ni deprimir-se amb les crítiques desaforades i malèvoles.  

Nota: Més informació del llibre a la web d'Editorial Base.  

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Fallece el baterista de jazz, Pete La Roca

Peter Sims, más conocido como Pete La Roca nació en Nueva York el 7 de abril de 1938 donde murió el 19 de noviembre de 2012 a consecuencia del cáncer que padecía.

Empezó tocando los timbales en bandas de latín jazz, de donde procede su sobrenombre en castellano. En 1956 estudiaba abogacía y actuaba en el club Birdland, donde conoce al baterista Max Roach, quien le consigue un trabajo con el saxofonista Sonny Rollins con el que estuvo tocando de 1957 a 1959.  Después estuvo tocando con músicos como Slide Hampton, Tony Scott y John Coltrane con el colaboraría en su cuarteto. En 1962 estuvo tocando con la pianista Marian McPartland y ese mismo año decidiría formar su propio grupo.

Entre 1964 y 1965 trabajó con el trompetista, Art Farmer y grabaría para Blue Note su primer disco a su nombre con el título de "Basra" (Blue Note 1965) con el que consigue buenas críticas en los medios especializados. En ese disco colaboraría el gran saxofonista Joe Henderson. Como artista principal editó un par de discos más titulados “Turkish Women at the Bath (Douglas, 1967) también editado como Bliss! (Muse 1968); y Swingtime (Blue Note, 1997).

En 1968 deja la música a nivel profesional para ejercer como abogado en Nueva York hasta finales de los setenta. En  1979 volvería a los escenarios. Como acompañante, grabó con Sonny Rollins (1957), con Johnny Coles (1963), con Joe Henderson (1963); con Freddie Hubbard (1964); y el Sonny Clark Quintet (1965), entre otros.

Pete será recordado como un buen baterista que empezó en el hard bop y que evolucionó hacia el free jazz. Tenía mucha técnica y gustaba de incorporar influencias étnicas a su música, desde sus primeros pasos con el latin jazz hasta cierto toque hindú.  

Este video pertenece a una actuación de junio de 1964 para la BBC nada menos que con Art Farmer al fliscorno, Jim Hall a la guitarra y Steve Sawllow al contrabajo. Se inicia con un solo de batería del difunto Pete La Roca.



martes, 20 de noviembre de 2012

Cabalgata Cósmica te invita a un viaje sonoro de hard rock con bitácora psicodélica

Cabalgata Cósmica es un power trio de Valencia formado por Rafa (guitarra), David (bajo y voz) y Lucas (batería) que acaban de grabar un Ep autoproducido con cinco canciones que puedes escuchar en su bandcamp. Formados a principios de 2011, coincidieron en compartir su pasión por el rock and roll ácido y duro de finales de los sesenta y principios de los setenta. Sin otra pretensión  que aprender juntos a expresar sus inquietudes musicales, han trabajado en un proyecto donde prevalecen esos esquemas de dura psicodelia y hard rock al que añaden detalles de experimentación propios del krautrock más una pasión incontrolable por esa distorsión tan habitual en los noventa. De este modo consiguen elaborar un repertorio original y propio basado en ideas que plasman en este Ep de cinco canciones que te presentamos. 

Rafa. Foto: Julián Jiménez
Su música está cargada, con determinación y excelentes propuestas, de potentes guitarras saturadas, un bajo distorsionado y una batería precisa. El resultado es una instrumentación que aprisiona a la voz principal mientras nos cuenta historias pasionales entre una tormenta de sonidos sin contemplaciones que añaden fuerza a su mensaje. Estas canciones se grabaron y mezclaron en el estudio CEU con Alex Román, entre la primavera y el otoño de 2012, quien también se encargó de la producción con la colaboración del grupo. Por el momento se trata de una maqueta en la que también han colaborado en la fotografía Julián Jiménez y en el artwork,  David Vivó.



David. Foto: Julián Jiménez
La contundencia y agresividad manifiesta del tema “El Trabajo os hará liebres”, ya es un aviso paras navegantes cósmicos sobre el contenido de la bitácora psicodélica de este poderoso trío: Guitarras distorsionadas creando una pared de sonido infranqueable, bajo y batería ambos galopando y esa voz discurriendo pendiente abajo al tiempo que sortea obstáculos de fuzz y wah wah. A destacar esos solos de guitarra cargados de pedales creando una atmósfera alucinante donde se superponen planos sonoros provocativos, dominantes y con un punto de paranoia que los convierten en cautivadores. No faltan tampoco las pausas temáticas tras las que todo cesa para sumergirnos, mediante  compases tétricos, en finales abiertos con el objetivo de remover nuestra imaginación.  

El ritmo del siguiente tema, “Espacio Exterior”,  se ralentiza sin perder intensidad ni llegar a la pesadez del stoner. Siguen presentes esos efectos de dura psicodelia, acercándose al punk, que desembocan en un pasaje de solos de guitarra superpuestos para crear un clímax hipnótico mientras el bajo aporta un excelente acompañamiento de contrapunto. Las guitarras confluyen en un riff final que nos aboca al abismo del que remontamos con la línea principal del tema. Le sigue “Lo volverías a hacer”, canción que se inicia con una explosión al que se suma una verdadera cabalgata de guitarras y ritmo punk enloquecido cercano ya al hardcore, sin tregua, de principio a fin. “Sieg Heil, mon amour” es un alud de distorsiones invitándote a la danza tribal con un poderoso riff de guitarra y bajo. Excelente y preciso recorrido guitarrero en los compases finales que rompen la dinámica del tema y le otorgan una nueva visión que lo enriquece.

Lucas. Foto: Julián Jiménez
El último tema grabado obedece al nombre de “Vertedero Emocional” y en el vuelcan toda su rabia y devoción psicodélica para conseguir un universo de descargas pasionales entre solos lisérgicos desquiciados pero a su vez muy sensuales. Al final aceleran su interpretación en la última carrera de esta sensacional cabalgata que aún nos ofrece un solo final que va muriendo y que confluye en el riff principal de este vertedero para las emociones más viscerales.

Cabalgata Cósmica tiene entre manos unas cuantas ideas que si bien obedecen a unos parámetros musicales a caballo entre los sesenta y setenta , su proyecto no es en absoluto “revival”. Aunque sus objetivos no vayan de momento más allá del disfrute personal convirtiendo sus filias sonoras en canciones, su música es manifiestamente original. Aportan una visión propia con detalles novedosos que convierten su obra en contemporánea, y por supuesto perfectamente editable para disfrute de un amplio público potencial. No hay duda de que han empezado a cabalgar con las ideas muy claras y les auguramos grandes hazañas para apuntar a su ruidosa bitácora cósmica.     

Nota: Puedes escuchar los temas en el bandcamp.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Muere Billy Scott, cantante de soul

El 17 de noviembre de 2012 moría en Charlotte (Carolina del Norte) a los setenta años el cantante de soul Billy Scott, que formó parte de la banda de R&B, The Prophets. Había nacido el 5 de octubre de 1942 en Huntington (Virginia occidental).

A los Prophets se les conoce por ser los intérpretes de grandes temas de soul y funk entre los que destaca uno de bien conocido en la escena northern soul como es “I Got The fever” (1968). Los Prophets se crearon a mediados de los sesenta en Augusta (Georgia) y en esa banda también cantaba una magnífica vocalista llamada Barbara Goudy, esposa de Billy, quien murió en 2009. También  formó parte de la banda Roy Howard Smith, quien murió en 1998, autor de buena parte de los temas de los prophets incluido ese “I Got The Fever”.  Desde un principio eran un grupo multirracial, formado por hombres y mujeres, muy apreciado por la escena playera.

Durante los sesenta grabaron algunos singles con cierta repercusión. En 1966 para Jubilee sacaron los temas “Talk Don’t Bother Me / Don’t Look Back”, que también editó Delphi.  Después grabaron otras canciones como “Don’t You Think It’s Time”, “I Don’t Love You No More”, y en 1968 para Smash, subsidiaria de Mercury, su conocido “I Got The Fever” con “Soul Control” en la cara B. 

En 1969 cambiaron de nombre y pasaron a llamarse  The Georgia Prophets para después quedarse con el nombre de The Party Prophets.  En los setenta grabaron para Capricorn su también conocido tema “California”. Siguieron sacando canciones para varios sellos como Lamon en los ochenta, los noventa y la década de los dos mil.

Su primer Lp fue editado en 1971 para Custom 8 con el nombre de la banda.  Lo curioso de este Lp es que la información que he encontrado dice que solo se editaron 200 copias. Se vende por un precio considerable, supera los 150 dolares y como si se tratara de un disco de acid folk, quizá por la portada, que sí lo parece. 

Siguieron sacando álbumes hasta mitad de los dos mil. En la actualidad estaban aún en activo residiendo en Charlotte (Carolina el Norte) con el difunto Billy Scott cantando acompañado de Cindy Floyd, más Randy Floyd, guitarra y voces; Paul Barnes, baterista y voces; Chris Bumgarner, bajo; y Mike Miller, teclista y voces. En octubre de este año le diagnosticaron a Billy un cáncer pancreático que le ha llevado a la muerte.


jueves, 15 de noviembre de 2012

Crudo Pimento, “máxima crudeza” en manos de Raúl Frutos e Inma Gómez

Crudo Pimento es el nombre con el que el multiinstrumentista y cantante Raúl Frutos presenta su nuevo proyecto acompañado por Inma Gómez a la percusión. Tienen grabadas tres canciones que puedes escuchar en su bandcamp en las que mezclan varios estilos procedentes del folklore norteamericano, desde el blues al rock and roll primitivo pasando por el bluegrass, con los ritmos latinos y antillanos, desde la cumbia al calypso pasando por el mento.   

Al murciano Raúl Frutos le avala una fructífera trayectoria de composición e interpretación musical ya sea en solitario o bien acompañado de otros músicos, en proyectos como Traje de Uña Nueva, o The Ben Gunn Mento Band. En Crudo Pimento se acompaña a la percusión de Inma Gómez, que inicia así su faceta creativa musical tras ser conocida como directora de la web de información, Rated Muzik, así como organizadora de conciertos o mánager de los Ben Gunn Mento Band.

Los Ben Gunn Mento Band grababan en 2011 un Ep, que fue editado con Enlace Funk Magazine a principios de 2012. El disco contiene un amplio abanico de ritmos latinos y antillanos con toques de mento, calypso, cha cha cha, cumbia... en magníficos temas como “Jumbee”, “Big Boy & The Teacher feat. Mr T Bone (live RNE3)”, “Mariana” y “Don't touch me tomato feat. Mr T Bone”. Grabaron el disco: Raúl Frutos, Paco Frutos, y Lord Tone, a las voces; Javi Pitos al clarinete; Raúl Frutos a la percusión; Paco Belchí a la flauta travesera; Lord Tone a las maracas, güiro y voces; Paco Frutos al Timple y Tres; y Raúl Frutos a las percusión y marímbula, más el fabuloso trombonista Mr. T Bone. 

Tras el éxito de esta original formación, Raúl e Inma han unido fuerzas para dar forma a Crudo Pimento. Un proyecto que, como ellos mismo apuntan, “nace de la necesidad de devolver la música a su mínima expresión y máxima crudeza”. Y lo consiguen mediante atractivas instrumentaciones con banjo híbrido y la marímbula artesanal construida por el propio Frutos a partir de una lata de pimentón. Como el resto de su trabajo, las canciones de Crudo Pimento han sido grabadas en su propia casa por el mismo Raúl.
 
“Estanco Fight”, empieza con el testimonio de un consumidor de puros, que fuma como muchos españoles: “en los Toros”.  Con ese toque latinizado a lo Tom Waits, que para él quisiera, construyen ricos movimientos rítmicos y melódicos, ciertamente inclasificables por originales aunque se nos antoje cierto regusto cubano underground a los Popotitos de los Teen Tops o si lo prefieres al “Bony Moronie” de Larry Williams. “Apio for Mingus”, tiene un excelente toque latino, bailable y sereno. El título es un guiño a “Los Mariachis” de Charlie Mingus, canción incluida en la edición de 1986 del álbum grabado en 1957, con el título genérico de “Tijuana Moods”, más el apio murciano.  El tercer tema que nos ofrecen de momento Crudo Pimento, llamado “Tic, Tac, Toc”, tiene unos sencillos pero muy efectivos toques de blues del delta acompañados de una precisa percusión que reafirman su contenido vibrante y visceral.

Según nos cuentan sus propios protagonistas, la intención es editar estas canciones en un disco para que podamos disfrutar de una elegante edición con su correspondiente artwork en el que destaque su portada, diseño de Inma Gómez.  Los temas tienen un estilo propio que demuestra, una vez más, el constante trabajo de investigación musical que realiza este artista murciano sobre los ritmos latinos y antillanos que ha decidido fusionar con las raíces del blues del Delta acompañado de mínima pero sugerente percusión.  

Nota: Si quieres escuchar los temas de Benn Gunn Mento Band, puedes hacerlo aquí. Los de Crudo Pimento están disponibles aquí.
 

 

Fallece Martin Fay de los Chieftains

Martin Fay nació en Dublín en 1938, ciudad donde murió el 14 de noviembre de 2012. Fue miembro fundador de los Chieftains, banda de música folk irlandesa con los que estuvo tocando hasta el año 2002 en que decidió retirarse.

The Chieftains se fundaba en 1962 y en 1963 sacaron un Lp de título homólogo con Paddy Moloney (Uilleann pipes que es la gaita irlandesa, y la flauta llamada tin whistle), Martin Fay (violín celta o fiddle y bones o huesos, instrumento de percusión tradicional), Seán Potts (tin whistle) y David Fallon (bodhrán, pandero irlandés) y Michael Tubridy (flauta, concertina, especie de acordeón pequeño, tin whistle). Procedían de la orquesta Ceoltóirí Cualann, de Seán O'Ríada y de la escena de pubs de Dublín. A diferencia de otras bandas de renombre como los Dubliners o The Clancy Brothers, los Chieftains son totalmente instrumentales. El segundo disco “The Chieftains 2”, salió en 1969 con algunos cambios de formación. Seán Keane se incorporó como segundo violinista y Peadar Mercier reemplazó a David Fallon en el bodhrán.

En 1971, saldría su tercer disco The Chieftains 3 y a partir de aquí consiguieron el reconocimiento internacional.  Por la banda han pasado otros músicos como el pianista y arpa irlandesa, Derek Bell, que falleció en 2002 y Barney McKenna, extraordinario intérprete de banjo, que tocó con ellos algunos meses al principio y que murió en 2012.  

Los discos de los Chieftains llegaron en 1980 hasta el número 10. También han sacado varios directos y han seguido grabando hasta este 2012 que se editó “Voice of Ages” en el que han colaborado artistas como Imelda May, entre otros. Todos los Chieftains han tenido también otros proyectos en solitario y como banda han realizado colaboraciones ejemplares como la de 2010 con Ry Cooder en el álbum “San Patricio”, homenaje a un batallón irlandés que luchó  con el ejército mexicano en la guerra de 1846 a 1848 contra los Estados Unidos.